Por Jorge Mateos– Hay un momento en la vida del hombre en el que verse bien ya no es sólo un capricho, es un estilo de vida, una necesidad tan básica como comer, dormir o respirar.
A diferencia de lo que muchos podrían pensar, para un hombre, tener un look atractivo, limpio y ordenado no es mucho más fácil que para las mujeres.
De hace un par de años para acá, hubo un boom de barber shops en la Ciudad de México, que la verdad, a todos nos ha hecho la vida más fácil.
La cultura de ir al barbero por un original corte de pelo, recortar, delinear y cuidar la barba estaba prácticamente muerta en nuestro país, y es increíble que esté regresando, sobre todo, para los hombres que gustamos de cuidar nuestro aspecto.
Las barberías actuales, en realidad, son como un spa para el hombre ¡y claro que tengo una favorita! Mostacho Barber Shop es una de las mejores de la ciudad; desde el recibimiento al entrar al lugar hasta la experiencia, que es única. Cuando te vas, sales con deseos de que tu barba y pelo crezcan rápido para poder regresar.
Este spot, ubicado en la esquina de Parque España y Sonora, es un espacio dedicado 100% al hombre, que inspira a querer verse mejor y atreverse a cosas nuevas. Cuando llegas, ya te está esperando una Affligem a la temperatura ideal para que empieces a relajarte. Al llegar tu turno de pasar a la silla, empezarás a vivir una de las mejores experiencias.
Si no sabes qué estilo de corte quieres, sólo es cuestión de comentárselo a sus experimentados barberos -que por cierto, todos han estudiado y están certificados para ser barberos profesionales– y, seguramente, encontrarán el estilo perfecto que vaya de acuerdo a tus ángulos y forma de cara.
La verdadera experiencia comienza cuando están por trabajar tu barba. Lo primero que sucede es que el barbero reclina tu silla para quedar en una posición muy cómoda, ahí es cuando puedes empezar a relajarte. Para que descanses, te ponen dos pepinos en los ojos, que ayudan a borrar marcas por cansancio y ojeras.
Lo que sucede después te lleva a un estado total de relajación. Una toalla caliente es colocada en todo tu rostro para ayudar a abrir los poros y que cada vello facial salga con mayor facilidad. Después de unos minutos con la toalla en la cara, el barbero la retirará y pondrá crema caliente para empezar a trabajar con todas sus herramientas.
No queda nada más que relajarse y dejar que el experto haga con tu barba exactamente lo que le dijiste. Sólo escucharás el ruido de su máquina mientras recorta y sentirás la navaja recorrer tu rostro y cortando delicadamente cada vello para lograr el delineado perfecto.
Cuando vuelvas a abrir los ojos, serás otro completamente. Tu barba y tu pelo se verán prácticamente perfectos tras pasar por las manos expertas de los barberos de Mostacho Barber Shop, y una parte del proceso se repetirá. Ahora, una toalla fría es puesta en tu cara para cerrar todos los poros, y tu barba será bañada en un bálsamo que la cuida, la hace brillar más y aparte huele increíble.
Todos los productos que usan en esta barbería, son de la mejor calidad y, sin duda, querrás regresar inmediatamente después de haberte ido, pues cada minuto de tu tiempo y cada peso invertido en Mostacho, vale más que la pena.
